Diego Trillo, el pastelero autodidacta que conquista A Costa da Morte con las galletas que hacía con tres años
Diego lleva toda la vida elaborando dulces. Con solo tres años ya se ponía el gorro de pastelero para ayudar a su madre en la cocina de su casa. “Para mí era un juego”, reconoce. Juntos elaboraban, cada Navidad, unas galletas de mantequilla que acabaron por hacerse famosas entre sus familiares y amigos. Galletas que ahora degustan sus clientes.